Cuando muere un ser querido II Parte
por Mariene Piñero
La
pandemia del Covid-1, no enfrentó a uno de nuestros mayores temores: “la
muerte”, nos sentimos vulnerables a la enfermedad y sobre todo a perder lo más
valioso que todos tenemos “la vida”.
Muchas
personas han muerto, no sabemos todavía cuantas personas pueden fallecer por
esta penosa y trágica enfermedad.
La
tristeza nos embarga sólo con conocer las cifras de muertos en los diferentes
países del mundo, sabemos que la gente sufre y pierde a sus seres queridos.
Qué
pasa ahora con esta pandemia, que muchas personas mueren sin poder despedirse,
eso representa un dolor muy grande, primero por qué la culpa de no poder estar
con ella, carcome nuestra conciencia, de no saber cómo fueron sus últimas horas
y no poderla acompañar.
Este
hecho, nos hace sentir aún más ansioso y con una tristeza devastadora, sin
poder hacer nada ya que debemos protegernos para evitar contagiarnos.
Cuando
muere un ser querido, nuestro mundo se resquebraja, la vida cambia y debemos
reajustar nuestra realidad familiar, vivimos un duelo que afecta nuestra vida,
muchos no saben cómo manejarlo.
Cada
quien lo vivencia a su manera, es difícil establecer tiempo y emocionalidad, es
variable de acuerdo a nuestra proyección personal, esto es muy importante
respetarlo, ya que en mi experiencia he
tenido duelos muy largos y penosos.
Aunque
ahora se habla de la muerte con una mayor naturalidad, no ha dejado de ser un
misterio, desconocemos tantas cosas de ella, que nos atemoriza, inclusive mucha
gente siente terror de sólo pensar que morirá.
A
nivel psicológico, un duelo no debe durar más de un año, sin embargo hay personas
que pueden vivirlo por más tiempo,
inclusive pueden tenerlo por 3 o más años, requiriendo de ayuda profesional
para solventarlo.
Como
especialista en salud mental, aquí les dejo unas sugerencias para superar poco
a poco la pérdida de un ser amado:
Es
importante contar con el apoyo familiar para superarlo, sino se cuenta con
familiares cercanos, buscar apoyo con algún vecino o especialista.
Conversar
lo que duele: nuestras culpas, miedos, tristezas, sentimientos, rabias y
frustraciones. Entender que el dolor no se va de un día para otro, todo lo
contrario se puede intensificar, puede haber días muy difíciles y otros más
manejables.
Debes
expresar tus sentimientos, llorar, inclusive patalea, si lo sientes, es momento
de expresarlo, esto es muy importante ya que sentimientos encajonados dañan
nuestra salud.
Realiza
rutinas que te ayuden a seguir con tu vida y a salir un poco de la tristeza y
el sentimiento de dolor.
Si
eres religioso, visita tu iglesia o grupo y participa de las actividades,
inclusive comparte con los más cercanos tus sentimientos, estas personas están
allí para ayudarte.
Sal
de la casa, visita un parque o un lugar natural, esto te ayudará a reconectarte
con la vida.
Ten
paciencia contigo mismo, no fuerces ninguna actividad que no quisieras
realizar, esto es importante para ayudarte a comprender que es un proceso.
Mañana o el siguiente mes será diferente, te sentirás mejor y podrás realizar
lo que no has podido hacer, inclusive en meses de inactividad.
Siempre
recuerdo a una amiga que perdió a su madre, después de una penosa y larga enfermedad y sólo deseaba usar ropa oscura o
negra, decía que su ánimo no le permitía usar otro color, paso mucho tiempo,
creo que años, hasta que un día cambio
de opinión y comenzó a usar ropa de diferentes colores.
El
duelo es personal, cada quien lo desarrolla de acuerdo a su peculiaridad y
vivencias lo importante es no quedarse estancados en él, porque sino
desarrollaremos otras enfermedades mentales e inclusive física, ya que la tristeza y la depresión pueden
afectar seriamente nuestro organismo.
Recordemos nuevamente una frase muy conocida que señala: "tu
no lloras por tus muertos, lloras por ti", el duelo lo tenemos más por nosotros, que nos
quedamos sin ellos, sentimos tanto su ausencia, inclusive creemos que no
podremos sobrevivir a esta gran tragedia.
Personalmente
voy poco a poco, piano a piano con mis duelos, resulta doloroso hablar de
ellos, pero es importante manifestar nuestras emociones, si me quedo con ellas,
siento opresión en mi corazón.
La
vida nos muestra su fragilidad, no somos
eternos, lo mejor es conocer y saber manejar estos procesos emocionales, hacerlos
más familiares, la muerte es parte de la vida, es importante concientizar su
tangibilidad para que no afecte nuestro paso por este maravilloso mundo.
¿Cómo vivencias tus duelos?
Comentarios
Publicar un comentario