El tesoro mejor guardado de Venezuela
Mucha gente puede decir que el tesoro mejor guardado de Venezuela es su petróleo, su oro y piedras preciosas, o sus hermosos parques y monumentos naturales como el Salto Ángel, los Tepuy, o el Pico del Ávila ubicado en Mérida.
Pues
déjeme decirle que el tesoro mejor guardado es su “gente”, les aseguro que somos diferentes a cualquier país del
mundo.
Acostumbrados
a ser respetuosos con cualquiera, somos cercanos y afectivos, alegres y nos encanta socializar.
Gente
cálida en su mayoría, donde nos hacemos amigos de aquellos que no conocemos e
inclusive lo podemos integrar a nuestro grupo de amigos.
Donde
nuestro vecino es nuestro hermano más cercano y con él hacemos fiestas o
reuniones e inclusive nos vamos de paseo o vacaciones.
Adoptamos
a aquel extranjero que se encuentra solo, lo añadimos a nuestro grupo y
caminamos con él.
Cuando
vamos de compra, le decimos “mi amor” a un vendedor, socializamos en una
tienda y disfrutamos de hablar con cualquier persona que estuviera allí.
Somos
hospitalarios, simples, cercanos, hacemos
de la vida una fiesta, cualquier logro o acontecimiento invita a celebrarlo y
compartir la alegría.
Si
conocemos a alguien en la playa, podemos inclusive bridarle cervezas o
cualquier comida, conocernos y disfrutar el momento.
A
pesar de las circunstancias, el venezolano es gente confiada, cree que todos
somos buena gente y se le puede abrir las puertas de nuestra casa.
El
venezolano no discrimina por raza, color o religión, quizás porque desde la
época colonial, se produjo un mestizaje
progresivo, somos de raza blanca, negra e indígena.
Disfrutamos
de todo y con todos, a pesar de las circunstancias adversas, pensamos que todo
va a pasar, tenemos siempre una sonrisa y la esperanza de que el mañana va a
ser mejor.
Nuestras
reuniones son abiertas, si alguien trae
a un amigo, no nos molestamos, más bien lo integramos y hacemos que disfrute
como cualquier invitado.
Una
fiesta, puede durar hasta el amanecer, no hay tiempo, y si la fiesta es en el
campo o zona rural, puede durar hasta días.
Compartimos
lo que tenemos y disfrutamos hacerlo, no somos mezquinos, nos alegran los éxitos de los demás y nos entristecemos
de los problemas que puedan afectar a cualquiera.
Tus
amigos te puede decir “te amo”, eso no es que este enamorado de ti, sino que
tiene un gran afecto.
En
situaciones de tragedia como un deslave o ecológica, que afecte a alguna
región, todo el mundo es solidario, nos
comunicamos, nos apoyamos, trabajamos unidos, buscamos soluciones.
Cuando
alguien está en el hospital, lo ayudamos y lo visitamos, nos unimos a la
familia y los acompañamos.
Puede
ser, que con tanto problemas políticos y sociales, el ciudadano venezolano
pueda cambiar, pero sabemos que por naturaleza somos alegres, sensibles y
preocupados por los demás.
Los
venezolanos que emigraron, llevaron su esencia y la están regando por todas las
partes del mundo, semillas de amor, respeto y empatía.
Nada
nos cambiará y cuando sea posible recibiremos a los extranjeros de manera
bonita como siempre lo hemos hecho.
Te amo Venezuela, eres el país más hermoso del mundo.
Dios bendice esta tierra y su gente hermosa.
Te invito a leer mi libro "Descubre lo extraordinario en ti"
Una belleza tu artículo, viva Venezuela
ResponderEliminarGracias por leerme.
EliminarHermoso Mariene, un fiel reflejo de quienes somos...
ResponderEliminarTal cual.
Y tú eres un vivo ejemplo de eso
Gracias por leerme, Juvenal.
EliminarMi Mariene querida, mejor descripción de nuestra Venezuela y su gente IMPOSIBLE, Felicitaciones por tan exquisita pluma.
ResponderEliminarMil gracias por leerme.
Eliminar