TOLERANCIA


por Mariene Piñero
Ser tolerantes es una virtud que es necesario cultivar en sociedad y en el metro cuadrado en el  cual nos desenvolvemos, es normal que los seres humanos sintamos en algún momento intolerancia hacia otros, sobre todo cuando nuestras posiciones no concuerdan.
Como personas, generalmente vamos a tener diferencias con los que nos rodean, por distintos aspectos, individualidades y singularidades, algunas de estas diferencias pueden ser en algún momento irreconciliables, desarrollando inclusive sentimientos de odio y de rencor que pueden permanecer en el tiempo y que pueden perjudicar nuestras emociones y por ende las relaciones. 
Cuando las diferencias son de raza, credo, ideologías políticas, de sentimiento, es necesario sacarlas a la mesa, confrontar, dialogar, establecer posiciones y hacerse entender, si es posible evitar ofender, ponerse en los zapatos del otro, sin juzgar, el desconocimiento de realidades hace que cometamos errores y juzguemos alimentando actitudes agresivas, de poca comprensión, fortaleciendo el odio y la intolerancia.
¿Cuándo  aprendemos a ser tolerantes? 
Cuando de niños compartimos con nuestros hermanos y compañeros de escuela y nos topamos con las diferencias de trato y de convivencia, entendemos su conducta y nos adaptamos al grupo, allí se encuentra la clave de la socialización. 
Generalmente los niños muestran más actitudes de tolerancia que muchos adultos, siendo capaces de manifestar emociones positivas de manera  rápida cuando se molestan con sus iguales, es común oír decir a un niño después de una pelea y donde hubo reconciliación, "este es mi amigo".
Muchas guerras podrían evitarse si tan sólo hubiese más mesas de diálogo, asertivas, entendiendo con profundidad las partes y ofreciendo soluciones pacificas al conflicto.
Si te cuesta practicar la tolerancia, es importante reflexionar: 

¿Qué actitudes del otro me molestan? 
¿Si estas actitudes se reflejan muy profundamente  en mi personalidad? 
¿Qué puedo hacer para entenderlo? 
No olvidemos que la tolerancia viene acompañada de otras tales como la paciencia, el amor, la justicia, el respeto, comunicación, entendimiento, cultivarlas es necesaria en la cultura de la paz. 
¿Has sido intolerante en algún momento de tu vida?
Cuéntame tu experiencia





Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi día perfecto

EL primer amor.

Buscando a Amílkar.