Lenguaje positivo

de Mariene Piñero 

Las personas extraordinarias utilizan un lenguaje positivo, optimista, propio para lograr ser exitosos.

En la programación Neurolingüística PNL, se busca cambiar el lenguaje que usamos en nuestra cotidianidad, generalmente hablamos de manera negativa, esto produce esquemas  que nos limitan inconscientemente y que por supuesto limitan nuestro actuar.

Aprendimos un lenguaje en nuestra infancia, lo que nuestros padres nos inculcaron, aquel lenguaje cotidiano que es difícil descuadrar ya que está muy atado a nuestros sentimientos, emociones y sobre todo pautas de comportamiento.

Repetimos ese lenguaje con quien nos topamos y con cierta gracia  decimos, “mi mamá siempre decía que no me mojará porque me enfermaba” o “No suelo salir los domingos, a mi papá no le gustaba”, “debo  comer tal alimentos, así lo hacíamos siempre en casa”, “soy torpe, me lo dicen mis hermanos”, pareciera un lenguaje inofensivo, sin embargo resulta el principal castrador de nuestras acciones de adulto, debemos identificar que lenguaje solemos  usar y cambiarlo en beneficio de una vida más sana, creativa o simplemente diferente.

Muchas veces son negativas las conversaciones en nuestro entorno  familiar, construimos  lenguaje de maltrato, de odio, de patrones  destructivos, viejos, caducos y así lo proyectamos al exterior.

No es fácil cambiar estos patrones ya arraigados, requiere desmontar a través de una manera disciplinada, un lenguaje insano, poco práctico y nada estimulante y cambiar progresivamente a un lenguaje asertivo y dinámico.

Las personas extraordinarias hablan positivamente, en lugar de decir “No puedo” expresan: “lo intentaré” -¿cómo lo voy a hacer?, -¿qué pasos voy a realizar?

Cuando hablamos de manera positiva, estamos cambiando la proyección de esta realidad en el mundo.

 Nos permite decretar palabras positivas en situaciones adversas, generando estados más asertivos para la solución de un problema.

La palabra tiene “poder”, por supuesto que sí, la podemos  usar para construir o para destruir, para motivar o para hacer sentir mal a una persona, para desarrollar grandes proyectos o por el contrario evitar que se produzcan.

Masaru Emoto,  investigador japonés, estudió el efecto del pensamiento, la palabra y la música en las moléculas  del agua, la cual refleja en espejo el pensamiento y suele  cambiar de forma cuando se le dicen malas palabras, cuando se le coloca música clásica o por el contrario se le ofrecen palabras de agradecimiento.

Tomando en cuenta sus estudios, un grupo de estudiantes en una escuela colocaron en tres frascos diferentes de arroz cocido, al primero se le pensaron  palabras de agradecimiento, al segundo malas palabras y al tercero no se le hacía nada, era como el frasco control, notándose que el primer arroz se coció produciendo una sustancia tipo miso (caldo), la segunda se pudrió y la tercera permaneció igual, esto refleja el poder del pensamiento en positivo.

El verbo se hace carne cuando se expresa, al decir palabras de agradecimiento se activa las células de la vida, del amor, en su efecto se generan moléculas sanas y se reconstituye el orden y la armonía.

Por tanto es importante evaluar la manera en que expresamos nuestro pensamientos, hablo de manera positiva o por el contrario mi lenguaje está lleno de frases desalentadoras o poco estimulantes, es mi lenguaje “lanza a matar” o son “palabras de aliento”, puedo generar sentimientos negativos o por el contrario producen mis palabras sentimientos de calma y sosiego.

Piensa, puedes cambiar situaciones sólo emitiendo un lenguaje que estimule, aclare y busque crear ambientes sanos y armoniosos.

Una persona que se expresa asertivamente contribuirá a darle un empuje efectivo a sus relaciones y por ende  a la sociedad.

Sugerencia para desarrollar un lenguaje constructivo:

• -          Habitúate a emitir juicios de valor positivos.
• -          Cuando tengas un lenguaje limitante, piensa si es de arraigo infantil y cámbialo por otro, piensa una frase diferente y  actúa en consecuencia, esto generará patrones nuevos.
• -          Cuando te encuentres quejándote de alguna situación, realiza un alto, evalúa    y comienza a hablar positivamente.
• -          Bendice frecuentemente, no uses palabras de maledicencia.
• -          Habla de manera positiva, alegre con palabras optimista  que estimulen en el ambiente procesos armoniosos.

      

 Extracto del Libro: "De lo ordinario a lo extraordinario" Transformación creativa

de Mariene Piñero

Te invito a leer mi libro "Descubre lo extraordinario en ti"